Era la última vuelta de la segunda carrera del circuito Red Bull Ring y los tres implicados, Robert Wickens, Pascal Wehrlein y Timo Scheider, luchaban por la sexta posición.

Un adelantamiento polémico de Wehrlein, hasta ese momento líder del campeonato, encendió el box de Audi, tanto que una orden del jefe de escudería, desató la polémica."Timo, échalo fuera".

Scheider no se lo pensó y actuó inmediatamente, tras escuchar la orden. Apenas dos segundos después, un sutil toque al coche de Wickens, desató una reacción en cadena sacando de la pista también a Wehrlein, y dejando a ambos pilotos en la grava.

El Audi contacta con el Mercedes y barre el coche de Wehrlein, y el agua en la pista hizo el resto. Los dos Mercedes quedaban fuera de la carrera. El compañero de Scheider, Mattias Ekström, lideraba la carrera. Con el alemán fuera, el piloto de Audi se ponía líder de la DTM. Timo Scheider fue descalificado horas después de finalizar la carrera. Una carrera en la que se desató la guerra entre Mercedes y Audi.