Debate sobre gasto militar
Tres voces, tres versiones: cómo Trump, Feijóo y Sánchez interpretan la cumbre de la OTAN desde perspectivas opuestas
Los detalles Trump acusa a España de quedarse un 2% del PIB en defensa; Feijóo celebra el compromiso firmado por Sánchez para llegar al 5%, mientras el Gobierno defiende mantener un gasto flexible cercano al 2,1% hasta 2029.
Tras la cumbre de la OTAN en La Haya, España se encuentra en medio de un debate confuso sobre cuánto va a invertir realmente en defensa. Por un lado, Donald Trump ha insistido en que España será "el único país que no pagará", porque se quedará en un 2% del PIB en gasto militar. Por otro, Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, afirma que "se ha acabado la farsa" porque Pedro Sánchez ha firmado el compromiso del 5%. ¿Quién está acertando?
El documento oficial que firmaron los jefes de Estado y de Gobierno tras la cumbre es claro: todos se comprometen a aumentar el gasto en defensa hasta alcanzar un 5% del PIB anualmente para 2035. España es parte de ese acuerdo, y el texto no contempla excepciones explícitas.
Entonces, ¿de dónde sale lo de 2%? Esa cifra proviene de una "flexibilidad" que España ha negociado previamente con el secretario general de la Alianza, Mark Rutte. Este pacto bilateral permite a España mantener el gasto en defensa alrededor del 2,1% del PIB hasta 2029. Ambos líderes lo confirmaron en sus ruedas de prensa tras la cumbre.
¿Significa esto que España está fuera del compromiso del 5%? No exactamente. La revisión de estos compromisos está prevista para 2029, cuando se evaluará el progreso y, si las circunstancias lo permiten, se podrá aumentar la inversión hacia ese 5%. Sánchez, preguntado al respecto, respondió que para entonces serán los españoles quienes decidirán si él sigue en el Gobierno y, por tanto, qué rumbo toma el gasto en defensa.
La cumbre ha dejado un juego de números e interpretaciones: mientras el texto oficial marca un objetivo a largo plazo, la realidad política y económica española ha llevado a pactar una etapa intermedia con un gasto más moderado. Así que, por ahora, España seguirá gastando cerca del 2%, pero con un compromiso formal a medio plazo que apunta a un aumento progresivo hasta el 5%. Cada parte saca la lectura que más le conviene, y la pregunta real será cómo y cuándo España podrá cumplir ese ambicioso compromiso.