Los detenidos por la muerte de los dos guardias civiles en Barbate el pasado mes de febrero viven a 3 kilómetros de los humildes barrios donde crecieron, San Bernardo y Atunara, en La Línea de la Concepción. Ahora, se han mudado al Zabal, calificada por el propio alcalde de la localidad gaditana como la calle Mayor del narcotráfico en la zona.

Está compuesta por decenas de edificaciones levantadas ilegalmente sobre terreno agrícola. Algunas de ellas son mansiones con piscina y hasta picadero para caballos. Los narcotraficantes se refugian allí cuando han amasado dinero, y las cámaras de Equipo de Investigación han logrado entrar junto a un expolicía de la zona.

"Ahí no vive nadie que no tenga vínculos con redes del narcotráfico y a muy alta escala", ha explicado el expolicía al programa, donde ha indicado además que las mansiones que se encuentran dentro de la muralla están vigiladas: "Controlan quién llega, quién sale... en el interior está el lujo, aquí solo vemos muros", ha añadido.