El exciclista norteamericano se ha convertido en el auténtico azote del Rey. Armstrong echa por tierra el deseo del monarca de salir de la crisis en la que se encuentra envuelta España y, pese a que al principio da bola a los argumentos de don Juan Carlos, acaba rebajando su euforia.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar, recoger datos estadísticos y mostrarle
publicidad relevante. Si continúa navegando, está aceptando su uso. Puede obtener más información o cambiar la
configuración en política
de cookies.