Una comunidad de vecinos del este de Texas, en EEUU, se está quedando al cuidado de tres niños que perdieron a sus padres el pasado fin de semana tras un incendio en su vivienda. Las dos niñas de 6 y 10 años, fueron capaces de salid de la casa, mientras que sus padres, Al y Shanice Rushing fallecieron. La pequeña de 10 años ayudó a su hermana a salir de la casa, pero los padres no sobrevivieron.

Una vecina de los Rushing, Lisa Skinner, se preguntó al conocer la tragedia qué sería de esos niños. Actualmente, los niños están quedándose con una familia del vecindario, pero los vecinos quieren hacer más por los pequeños.

Por ello, miembros de la comunidad recorrerán las casas con una hucha para recaudar dinero. Además, piden ropa, juguetes, mantas, accesorios para el colegio, "cualquier cosa que puedan necesitar".