Durante la sexta jornada del juicio a Bretón, acusado de asesinar a sus dos hijos el ocho de octubre de 2011 en Córdoba, han prestado declaración varios testigos que se encontraban en el parque el día del suceso y vecinos de la finca de "Las Quemadillas".
Dos jóvenes que se encontraban sentados en el césped a escasos metros de la barra de ejercicios donde Bretón dice que se sentó cuando perdió a sus hijos, han manifestado que en ese lugar no vieron a nadie sentado, ni tampoco vieron a niños jugando en la zona. Ambos han asegurado que en un momento dado el acusado se les acercó para preguntarles si "habíamos visto a sus hijos" y que si se enteraban de algo dieran "razón a la Ciudad de los Niños", lugar al que "se dirigió".
Una vez allí, el acusado se acercó a los monitores encargados de la seguridad e información del recinto infantil a quienes les dijo que había perdido a los menores en el parque anexo para que lo anunciaran por megafonía. Ambos han asegurado que vieron a Bretón en una actitud "muy tranquila para alguien que había perdido a sus hijos", ya que normalmente cuando ocurre algo similar "los padres vienen histéricos y hasta quieren cerrar las puertas del recinto".
También han pasado por la sala de vistas varios policías que buscaron a los menores en el parque y la agente que auxilió a la perito que determinó inicialmente que los restos óseos hallados en la finca de "Las Quemadillas" eran de origen animal.