La Guardia Civil comenzó las investigaciones el pasado mes de enero cuando tuvo conocimiento de la actividad delictiva de un grupo de personas de nacionalidad kosovar, asentadas en Madrid, que podría perpetrar robos con fuerza en empresas y entidades bancarias mediante el método del "butrón", que consiste en perforar una pared para acceder al interior del lugar.

El grupo desarticulado guardaba el material utilizado para cometer los robos en una furgoneta de alquiler que estacionaba en el barrio de Villaverde (Madrid), alejada de sus domicilios y próxima a una zona recreativa con gran afluencia.

En la furgoneta, los agentes encontraron gran cantidad de herramientas que empleaban en los asaltos como lanzas térmicas, gatos hidráulicos, radiales, inhibidores de frecuencia, transmisores, botellas de gas acetileno, guantes, pasamontañas y linternas.

En el vehículo, los agentes además encontraron siete botellas de gas acetileno, que hubiera supuesto un grave peligro para la integridad de las personas en caso de que se hubiera producido alguna explosión fortuita.

Las pesquisas permitieron revelar que este grupo era el responsable de robos cometidos en empresas ubicadas en polígonos industriales de Móstoles, Coslada, Mejorada del Campo, Fuenlabrada, Arganda del Rey, todas ellas de la provincia de Madrid, y otros, en la localidad de Tomelloso (Ciudad Real).

Asimismo, se realizaron varios registros domiciliarios y en uno de ellos se localizó una biblia de gran valor con tapas en oro y plata, que fue sustraída durante un robo cometido en un taller de orfebrería de Mejorada del Campo, en Madrid.