La obsesión por Internet llega a tal punto, que todo debe estar subido en la nube. La nueva moda consiste en subie vídeos que pueden resultar graciosos sobre nuestros hijos. No importa que sea lo que haga el crío, desde bailes graciosos, alguna monería o una llantina. Pero la obsesión llega a tal punto que es mejor grabarlo todo antes de ver si el crío se encuentra bien.

Los hay que prefieren hacer a sus hijos alguna broma pesada de dudoso gusto, como un padre que regala un huevo kinder a su hijo y cuando éste se dispone a comerlo resulta que es un huevo normal, nada de chocolate. No importa el mal trago que pasa su hijo, lo importante es compartirlo en Internet.

Otros, sin embargo, prefieren colgar en la nube la ilusión de sus hijos cuando van a recibir un regalo. Es el caso de una niña emocionada porque va a subirse en un tren por primera vez en su vida. Su padre, cámara en mano, no pierde detalle. El vídeo ha alcanzado los dos millones de visitas en apenas unos días.

Las funciones de colegio son un filón para este tipo de vídeos, pero los regalos o la llegada de los Reyes Magos no se quedan a la zaga.