El matrimonio de ancianos esperan angustiados, saben que ya no lo pueden parar. Incluso han colocado un sofá tratando de evitar lo inevitable.
Su tercer desalojo, el definitivo. Los agentes llegan, puntuales y tiran la puerta abajo, ante las cámaras de laSexta Noticias. No están solos, a su lado una treintena de personas les apoyan.
Es dramático, entre lágrimas y empujones les sacan de la que ha sido su casa durante media vida. Derrumbado, agradece entre sollozos, el apoyo de cientos de vecinos.
Su casa, con dos plantas, la compraron hace 28 años. Pero su vecino, antiguo asesor del colegio de arquitectos les denunció por construirla, dijo, sobre los cimientos de la suya. Antonio Méndez, septuagenario desahuciado, dice que "yo no tengo deudas con nadie. Mi casa fue comprada al contado". "Yo no quería recoger nada, esta es mi casa y se acabó" explica Berta Ferreriro, desahuciada.
Comenzó una batalla judicial, con informes periciales erróneos y un abogado incompetente. Podían demostrar que la casa estaba construída antes, pero cuando presentaron las fotos aéreas que les daban la razón, ya estaban fuera de plazo. Álvaro Dávila, alcalde de Taroconte, indica que "en esas fotografías es evidente que la casa que se construye en el 79 no puede estar encima de la que se construye tres años después".
Desde hace 10 años la casa es de su vecino. Los tribunales le dieron la razón y le adjudicaron la vivienda de sus vecinos tras sacarla a subasta.
La última conversación fue ayer a las 2 de la mañana. Sin dar frutos. El apoyo recibido ha sido incondicional. Incluso del alcalde del municipio, que les ha ofrecido una vivienda social para evitar que se queden en la calle con apenas 400 euros de pension.
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