La defensa de la sanidad pública en Ourense tendrá que pasar ahora el filtro del servicio gallego de salud. El veto de la red pública a que hablen con los periodistas ha indignado al personal sanitario.

Denuncian que es una mordaza para ocultar la información contra la privatización. Tendrán que pedir permiso cuando estén dentro de su jornada laboral y comunicarlo incluso cuando ya no estén trabajando.

"Los trabajadores de la sanidad tienen derecho a emitir sus opiniones sobre qué es lo que están haciendo, cómo influye las medidas que está tomando la administración. Eso de pasar por un filtro es absolutamente impropio o más bien propio de otras épocas", asegura Xosé Manuel Pereiro, Decano Colegio de Periodistas de Galicia.

La de Galicia no es la única traba que les están poniendo.  El hospital madrileño que pueden ver en las imágenes ordenó la retirada inmediata de unas fotografías expuestas en el  centro que muestran su lucha por el servicio público.

"Yo creo que evidentemente hay un trasfondo detrás que el contenido de la exposición debía molestar a alguien pero tampoco estábamos escondiendo nada",  declara David Hernández, médico del Hospital del Henares.

Pero no los trabajadores no se dejan intimidar. Las fotografías ahora las exponen en el salón de actos donde mantienen además su encierro.  Llevan 82 días y sin ninguna intención de rendirse.