Las lluvias torrenciales siguen afectando a la costa mediterránea, Girona una de la ciudades más afectada.  Con el agua por las rodillas, moverse por las calles andando y en coche es imposible.

Contenedores arrastrados por las riadas y más coches en mitad de la calzada que poco podían hacer para salir de esta situación. Los bomberos han registrado unas 40 llamadas de socoro en tan solo una hora.

En Blanes, las lluvias han venido acompañadas de fuertes rachas de viento y en Malgrat de Mar, sus vecinos han visto cómo sus calles se han convertido también en auténticos ríos. Allí, se han registrado 31 litros por metro cuadrado en tan solo media hora.

Esta gran inestabilidad atmosférica lleva asociados fenómenos violentos como el granizo o incluso las mangas marinas como ésta que ha sorprendido esta tarde a los vecinos de Denia, en Alicante.

La situación se prevé más tranquila en los próximos días aunque se esperan fuertes tormentas el próximo lunes en la zona mediterránea.