En Aluche (Madrid), Antonio Guerra lleva casi dos meses sufriendo el parón sanitario, ya que su enfermedad crónica no entiende de huelgas. ''Dependemos de ellos, sin ellos no podemos vivir''.

Entre Antonio y María del Carmen, los dos con insuficiencia renal, toman casi 50 pastillas diarias, por eso luchan con los médicos para que se mantenga la gestión pública. ''Si estoy viva, es gracias a la Sanidad pública''

Desde que comenzara la huelga, se han paralizado, solo en Madrid, 3.934 intervenciones quirúrgicas y miles de pacientes han visto canceladas o postpuestas sus citas médicas.

El futuro de muchas vidas depende de la lucha de los sanitarios. ''Lo que están pidiendo es justo, es el futuro de nuestra enfermedad'', declara la portavoz de la Asociación de Esclerodermia de España, Manuela Pérez.

Begoña García, médica de atención primaria y enferma crónica no entiende que se quiera privatizar ''una cosa que funciona''.