Manuel sufrió un infarto de miocardio cuando tenía 54 años. “Un gran dolor en el pecho, molestia en los brazos y sobretodo falta de vida”, asegura Manuel. Una vida que fue salvada gracias al sistema en red que existe en Galicia para tratar infartos. “Tenemos unos centros médicos estupendos, tanto en Coruña, como en Santiago, como en Vigo”, declara.
Pero no hubiera tenido tanta suerte si le hubiera ocurrido en Alicante o en Castellón. “En estas zonas, te recomiendo que tengas un helicóptero porque va a ser muy difícil que llegues a un hospital para recibir un tratamiento en tiempo y forma”, afirma el secretario general CESM Comunidad Valenciana, Andrés Vicente Cánovas.
Y es que la Comunidad Valencia es la comunidad autónoma líder en mortalidad por infarto seguida de País Vasco y Andalucía. Al otro lado de la balanza se encuentra Navarra con menos mortalidad seguida de Cataluña, Castilla- La Mancha y Galicia.
Ramiro Trillo, presidente de la Sección de Hemodinámica y Cardiología SEC: “Hemos detectado que las comunidades que tienen establecido un programa estable de funcionamiento en red de tratamiento, hay mejores resultados”.
Los recortes en sanidad agravian esta situación, cuando el factor tiempo es el más importante. “Cuanto menos tiempo tardemos en administrar el tratamiento, el pronóstico y la evolución del paciente será mucho mejor”, declara Trillo. Una desigualdad sanitaria que necesita urgentemente mejorar su organización.