Todos los esfuerzos son pocos para luchar contra un fuego voraz que ha quemado en Cualedro, Ourense más de 450 hectáreas. Para controlarlo han sido necesarias 26 brigadas empleadas a fondo contra unas llamas que dejaban a su paso un paisaje de destrucción. Una noche muy larga que mantenía a los vecinos en vilo y contemplando con impotencia el incendio.
Ahora el fuego que preocupa es el de Pobra de Trives, un incendio de nivel 2 donde la imagen de la voracidad de las llamas, es la casa calcinada y reducida a escombros de una mujer y sus tres hijos.
"Está bastante controlado ahora, pero fue un día muy duro", destaca una bombera. Los efectivos gallegos, a los que se han sumado diez medios aéreos y dos brigadas especiales, sofocan también los incendios activos en Melón y Cervantes.
Siete días de infierno y llamas y 7.000 hectáreas reducidas a ceniza. 2.500 personas evacuadas desde el pasado lunes y cuatro incendios tan graves que han supuesto el 90% de la superficie quemada en Galicia en todo el año.
