El juez considera probado que la acusada, el pasado 12 de junio de 2017, siguió hasta su portal a la víctima tras observarla sacar 250 euros de un cajero de la calle Artica de Pamplona.

Se subió con ella en el ascensor momento en que en agarró la bolsa de la compra de la víctima, le dio varios tirones haciendo que ésta se rompiese, se apoderó de ella y salió corriendo escaleras abajo, quedándose con el dinero y tirando el resto de la bolsa.

Como consecuencia de este suceso, la víctima sufrió una erosión superficial en muñeca derecha. En su escrito, el juez señala que la acusada, en la fecha de los hechos, padecía de abuso de consumo de sustancias estupefacientes.

Había sido condenada previamente por un delito de hurto el 20 de febrero de 2016 por el Juzgado de Instrucción nº 2 de Logroño y por un delito de robo con fuerza el 4 de mayo de 2017 por el Juzgado de lo Penal nº 2 de Pamplona.

Por todo ello, ha sido condenada a 20 meses de prisión por un delito de robo con violencia con las atenuantes de reparación del daño y toxicomanía, y con la agravante de reincidencia. Asimismo, ha sido condenada por un delito leve de lesiones al pago de 480 euros, así como al pago de una indemnización a la víctima de 550 euros.