Es conocida por todos la triste costumbre de regalar animales cuando llega la época navideña, como si de un juguete se tratase. Sin embargo, la situación es más triste aún cuando, con la primera festividad, se dan los primeros abandonos. Esto es lo que ocurre cuando llega la Semana Santa y los dueños de los animales se ven ante la tesitura que supone ver tus vacaciones limitadas a su cuidado.

Ante esto, muchos deciden abandonarlos a su suerte y no tener que preocuparse del animal una vez que llegan sus deseadas vacaciones. En esta época, los abandonos aumentan hasta un 40%, de los cuales el 70% son cachorros con pocos días de vida.

Este estudio ha sido realizado con más de 20 asociaciones protectoras de animales en España y elaborado por 'Tiendanimal', quienes aseguran que "queda mucho trabajo por hacer" en cuanto a la concienciación sobre la responsabilidad que supone tener a tu cuidado a un animal.

'Tiendanimal' ha querido dejar claro que cuenta con un servicio de adopción de mascotas y colabora con distintas asociaciones protectoras. Ellos mismos han elaborado una serie de consejos para aquellos que se encuentren ante el abandono de un animal, donde piden llevarlos a una protectora de animales "siempre con responsabilidad".

Es importante acercarse al animal con cuidado ya que no podemos saber cómo reaccionara, sobre todo por el miedo que tendrá ante su situación. Una buena idea es hacerlo mientras le ofreces algo de comer. "Es imprescindible" hablar al animal con la delicadeza suficiente para que entienda que no eres una amenaza para él y comprobar si tiene alguna chapa de identificación.

Es importante la visita al veterinario para que "le haga las revisiones oportunas y le pueda identificar con el microchip". Pero sobre todo y más importante, los consejos para evitar tener que enfrentarnos a estas situaciones. Antes de abandonar a un animal, tener en cuenta la existencia de residencias caninas como opción para cuando viajes, siempre y cuando cumplan con las condiciones de espacio e higiene necesarias.

Otra opción es pedir a un familiar responsable, preferiblemente que el animal conozca, que se haga cargo de él en tu ausencia. Ante cualquier circunstancia, el abandono nunca es una opción.