El Ictus es la causa más frecuente de discapacidad en el adulto y tiene graves consecuencias en la vida del individuo y su entorno. Los familiares de los pacientes no saben qué hacer, esperan a que los médicos actúen y el afectado mejore.

El cerebro tiene capacidad para compensar las zonas dañadas y minimizar las secuelas. Para ello, debe ser estimulado de forma precoz por lo que la forma en la que la familia se relaciona con el afectado en los primeros momentos es decisiva.

Para contribuir a mejor esta situación, los profesionales de DACER llevan 2 años colaborando con el Dr José A. Egido en la unidad de ictus del Hospital Clínico San Carlos, en un proyecto encaminado a enseñar a las familias de los afectados que ocurre tras un daño cerebral y de qué forma pueden contribuir a la estimulación.

Los resultados han sido muy positivos. Las familias pierden el miedo a la discapacidad, a llevarse a casa un familiar que en principio no puede caminar, hablar, manipular y comer con seguridad.

Por ello, DACER ha creado una guía detallada para explicar a las familias qué pueden hacer para ayudar a sus seres queridos durante el tiempo que están en el hospital.

La guía “estimulación precoz del paciente con daño cerebral” está disponible de forma gratuita en su web. Está elaborada por profesionales expertos en rehabilitación neurológica y explica de forma clara y concreta actividades para favorecer aspectos clave como la postura, la sensibilidad, el movimiento, la deglución segura, el lenguaje, la orientación o la memoria.

Esta guía pretende ayudar a las familias a implicarse desde el primer momento, contribuyendo a que las horas en blanco que pasan junto a la cama de sus seres queridos sean de utilidad para todos. De esta forma, la recuperación será más fácil y los primeros momentos más llevaderos para todos.