Según han confirmado fuentes de la dirección federal, el plan de registrar este mismo mes una propuesta completa en el Parlamento se ha ido al traste con la decisión de Rubalcaba de abandonar la Secretaría General por los resultados del 25M y convocar un congreso extraordinario para sustituirle.
Con una Ejecutiva saliente se ha acordado dejar "la tercera vía" para que la nueva dirección le dé los últimos toques antes de presentarlo en el Congreso, pese a que eso retrasará los tiempos y achicará el margen de maniobra antes de la consulta soberanista prevista para el 9 de noviembre.
La idea es crear una ponencia constitucional para reformar la Carta Magna en sentido federal que dé solución al debate soberanista de Cataluña e impulsar un marco de diálogo entre partidos y comunidades autónomas para, como mínimo, hacer un diagnóstico sobre el actual problema catalán que dé paso a soluciones.
Siguiendo el modelo que aprobó el Consejo Territorial del PSOE en Granada en julio de 2013, y en sintonía con el PSC, la oferta pasa por convertir el Senado en una cámara territorial, en la que sus representantes sean elegidos por los gobiernos o parlamentos autonómicos, y suprimir en parte el artículo 8 de la Constitución que blinde las competencias catalanas en lengua y cultura.
Asimismo se propone delimitar en la Carta Magna las competencias exclusivas del Estado -el resto serían de las comunidades-, junto a la propia configuración de las autonomías en sus denominaciones actuales.
Todo el proceso, según los socialistas, debería definirse durante los próximos meses y luego aprovechar la convocatoria de las elecciones generales para someter la reforma constitucional a referéndum.
Una consulta que, de acuerdo con sus estimaciones, podría satisfacer las ansias de consulta de buena parte de los catalanes. El PSOE, que está convencido de que la suya es la única solución al reto independentista, defiende la "simpleza" de la idea: primero negociar, luego pactar y después decidir.
"Los socialistas estamos convencidos de que la única manera de solucionar estas tensiones es por la vía de un diálogo entre todas las fuerzas políticas, que condujera a la renovación de ese modelo territorial", justificó Rubalcaba hace unos meses la petición del PSOE para crear una comisión parlamentaria que debatiera sobre el modelo territorial.