El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha admitido que no le gustaría "estar en el lugar" de Brasil tras la derrota histórica que sufrió su selección frente a Alemania en la semifinal del Mundial. Sin embargo, no ha pronunciado palabra al ser preguntado por el escándalo Gowex.
En declaraciones en los pasillos del Congreso, ha comentado con los periodistas que vio el partido y ha reconocido que fue "muy fuerte" el resultado de 1-7 frente a Alemania y que supone "la mayor derrota" en la historia de la selección brasileña.
Tras solidarizarse con los brasileños reconociendo que "deben de estar muy tristes" ha intentado restar importancia a la eliminación de Brasil del Mundial pues se trata solo de fútbol.