Morenés, que se reunió este sábado con el secretario de Defensa estadounidense Chuck Hagel en el Pentágono, dijo que Estados Unidos no ha pedido "ningún esfuerzo del tipo militar" a España.
Asimismo, el titular de Defensa negó que la declaración conjunta hecha pública por la Casa Blanca, en la que España y otros nueve países dan su apoyo a Estados Unidos, implique un compromiso de este tipo.
"Esa declaración lo que viene a decir es que no es aceptable la utilización de armas químicas, no porque se diga ahora en el G20, sino porque lo dicen las leyes internacionales", indicó Morenés en una rueda de prensa en la embajada española en Washington. Según un comunicado del Pentágono, Hagel y Morenés "hablaron largamente sobre la violencia en Siria", pero el español negó que en ese encuentro el jefe del Pentágono compartiera con él detalles de los planes militares estadounidenses o si prevén utilizar las bases de Morón y Rota, en territorio español.
Tanto el Pentágono como Morenés se ciñeron en sus declaraciones a las palabras del documento adoptado entre España, Australia, Canadá, Francia, Italia, Japón, Corea del Sur, Arabia Saudí, Turquía, Reino Unido y Estados Unidos en la cumbre del G20 de San Petersburgo (Rusia).
En éste, los firmantes "condenan" el uso de armas químicas en Siria, que en su opinión "apunta" a la autoría del régimen de Bachar al Asad, y "apoyan los esfuerzos tomados por EE.UU. y otros países para reforzar la prohibición del uso de armas químicas".
Morenés explicó que la postura de España respecto al supuesto uso de armas químicas del régimen sirio está contenida en ese comunicado y prefirió no entrar en "hipótesis" sobre la postura de La Moncloa en el futuro a este respecto.
"España, como el resto de los países de esa declaración, se alinea con esa posición internacional", reiteró el ministro de Defensa. Morenés lamentó que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas no haya actuado con premura para responder al uso de armas químicas en Siria, especialmente tras el ataque del pasado 21 de agosto, que Estados Unidos atribuye al régimen de Asad y que asegura que causó más de 1.400 muertos.
"El mundo no puede permanecer impasible con lo que está ocurriendo en Siria, independientemente de los conceptos estratégicos, estamos hablando ahora de conceptos humanos", explicó.
El ministro negó que Hagel le haya pedido usar las bases militares con presencia estadounidense en España si interviene en Siria. Morenés recordó que los refuerzos hechos por Estados Unidos con infantería de marina y helicópteros "Osprey" en la base aérea de Morón (Sevilla) no tienen por qué entrar en las planificaciones ofensivas de Washington, ya que su cometido es diferente.
La base de Morón cuenta con un destacamento de más de 500 infantes de marina desplegados para actuar como fuerza de respuesta rápida en ataques terroristas o emergencias en el Mediterráneo.
Si finalmente el Congreso estadounidense autorizase la intervención contra el régimen sirio por el uso de armamento químico, algo que podría lograrse la semana próxima, el presidente estadounidense, Barack Obama, ha prometido una operación "limitada" y sin soldados sobre el terreno.
Morenés y su homólogo estadounidense también hablaron sobre la importancia de la cooperación bilateral de Defensa en asuntos como la seguridad en el norte de África y el Sahel, para luchar contra el narcotráfico, el terrorismo y ante el incremento de la piratería en el Golfo de Guinea.
Hagel agradeció a España el compromiso durante la misión de la OTAN en Afganistán desde 2001, mientras que tanto España como Estados Unidos preparan la retirada de la mayor parte de sus tropas del país.
Morenés dijo que para conocer el número de tropas internacionales que seguirán en Afganistán tras 2014, será clave conocer los compromisos bilaterales entre Washington y Kabul para seguir manteniendo la seguridad y la estabilidad en el país centroasiático.