Los debates electorales se adaptan también a los nuevos tiempos. Se ha visto la primera entrega en Telemadrid. El plato estrella, el tradicional, Esperanza Aguirre frente a Antonio Miguel Carmona.
El formato de Telemadrid, el preferido por Esperanza Aguirre sólo convenció al 2,5% de la audiencia. En palabras de Alberto Garzón, candidato de IU a la presidencia del Gobierno, "Aguirre tiene una cultura política del autoritarismo y actuar en función de creer que maneja un cortijo". El nuevo tiempo político ha acabado con los viejos cara a cara y deja paso a nuevos modelos como el del canal Extremadura, con una fila de 12 candidatos.
Debates autonómicos en televisiones autonómicas. Allí donde ya no existen, como en la Comunidad valenciana, los candidatos debaten donde pueden. En radios o en teles regionales privadas. En Navarra, el Parlamento se queda grande aunque haya ocho candidatos.
En Cádiz, el debate entre candidatos a la Alcaldía lo organiza una asociación proderechos humanos en la facultad de Filosofía.
FIN DEL BIPARTIDISMO, FIN DEL CARA A CARA
FIN DEL BIPARTIDISMO, FIN DEL CARA A CARA
El auge de los nuevos partidos acaba con los debates tradicionales
La aparición de nuevas formaciones como Podemos o Ciudadanos ha acabado con los tradicionales cara a cara. En Extremadura, los 12 candidatos han comparecido en fila, y uno detrás de otro han tomado la palabra apenas unos minutos. Telemadrid ofrecerá hasta 15 cara a cara. El que más bronca suscitó fue el de Aguirre y el socialista Carmona. Un formato que sólo convenció al 2,5% de la audiencia, la mitad de los que siguieron la semana pasada el debate a seis de los candidatos a la Comunidad de Madrid.