A punto de empezar de nuevo la batalla electoral, el PSOE tiene claro que su enemigo será Pablo Iglesias, y Pedro Sánchez lo ha dejado claro disparando una y otra vez contra él en todas sus declaraciones.
Para el líder del PSOE, "Pablo Iglesias no representa a los votantes de Podemos" porque puede evitar el cambio, e insiste en dividir a Podemos entre el bueno, es decir, Errejón e Iglesias. "Cuando Errejón se sentó en la mesa tuvimos tres reuniones, pero cuando se sentó Iglesias no tuvimos ninguna", recuerda Sánchez.
Errejón se defiende asegurando que el líder socialista "busca excusas fuera de casa porque desde dentro no le han dejado acordar con Podemos. Y en esa guerra por la izquierda, un jugoso dardo será el pacto con Ciudadanos, algo que Podemos no olvida, porque "nos lleva a nuevas elecciones", según comenta Irene Montero.
El duelo se presenta duro y es el momento de hacer los equipos. Todo apunta a que Podemos repetirá con las confluencias, y también cada vez es más probable que cuaje la unión con Izquierda Unida a nivel nacional. En más que probable nueva campaña el voto de la izquierda estará más reñido que nunca.