Una veintena de niños entre ocho y doce años han fallecido debido a una intoxicación alimenticia tras comer en el comedor de su colegio en el estado de Bihar,en el noreste de India. Otros 27 permanecen hospitalizados, según ha informado el diario 'The Times of India'.
Los menores, de entre ocho y doce años, comenzaron a vomitar y a perder la conciencia tras almorzar jichdi, una comida típica de la zona a base de arroz y judías, en el comedor de la escuela primaria Dharamsati, en la localidad de Masraj, en el distrito de Saran. Un equipo forense ha acudido a la escuela para tomar muestras de la comida contaminada.
Según las primeras investigaciones, se ha determinado que es probable que las muertes se deban a restos de insecticida en el arroz, lentejas o vegetales que sirvieron en la escuela. También se barajan las causas de mala higiene y manejo de los alimentos. Los hijos de las cocineras también han sido afectados . Dos han muerto y otros dos están en el hospital.
Tras la tragedia, el ministro principal de Bihar, Nitish Kumar, ha convocado una reunión de emergencia para discutir la situación. Además, ha anunciado que compensará a las familias con 200.000 rupias, unos 2569 euros.
Cientos de residentes de la localidad de Masraj han salido a las calles para protestar por las muertes de los menores y han rodeado la comisaria de Policía. Allí han solicitado que se emprendan acciones contra los profesores de la escuela y contra las autoridades responsables.
El programa de almuerzos escolares en India es el más grande del mundo. Más de 100 millones de niños se ven beneficiados y es un incentivo para que las familias más pobres manden a sus hijos a la escuela y no a trabajar, ya que al menos una de sus comidas estaría asegurada. Datos que contrastan con la realidad vivida estos días en Masraj.