El nuevo texto ha sido rubricado por los dos negociadores jefes, el consejero del ministro mauritano de Pesca y Economía marítima, Cheij uld Baya, y el director de Asuntos Internacionales en la Dirección General de Pesca de la Comisión Europea, Stephaan Depypere.

El acuerdo nada dice sobre la posibilidad de que los pesqueros descarguen su capturas en el Puerto de La Luz en lugar de en el Nuadibú, como anunció el año pasado el entonces presidente canario Paulino Rivero, y las descargas seguirán haciéndose en puertos mauritanos.

El nuevo texto fue rubricado por los dos negociadores jefes, el consejero del ministro mauritano de Pesca y Economía marítima, Cheij uld Baya, y el director de Asuntos Internacionales en la Dirección General de Pesca de la Comisión Europea, Stephaan Depypere.

En cuanto al número de barcos que podrán pedir licencia según el nuevo acuerdo, que en el anterior acuerdo bianual eran 65, básicamente españoles, será definido posteriormente. Una de las mayores reivindicaciones del sector pesquero español, principalmente el gallego, era la vuelta de los cefalopoderos al caladero mauritano, del que habían sido excluidos en el acuerdo que expiró en diciembre, pero los mauritanos se han mostrado inflexibles.

Tampoco han cedido en la cuestión de los marinos locales, que seguirán siendo un 60 % de la tripulación total, un porcentaje que los negociadores no han conseguido reducir. Las especies que el acuerdo autoriza son los pequeños pelágicos, la gamba, el atún, cuyo precio se duplica hasta los 70 euros la tonelada, la merluza y los llamados "pescados de escama".

Queda por ver ahora cual será la valoración del acuerdo del sector pesquero español, que consideraba el anterior 2013-2014 como uno de los peores negociados por la UE y muy desventajoso para el sector.

Las negociaciones para este acuerdo han durado casi un año y han mostrado la dureza de las posiciones de Mauritania, que parece haber seguido los pasos de su vecino del norte, Marruecos, y poner condiciones cada vez más leoninas para la extracción de su pesca.

La Confederación Española de Pesca (Cepesca) ha manifestado que el acuerdo deja un "sabor agridulce", porque aunque la flota podrá volver al caladero africano, no ha conseguido reivindicaciones importantes para que el pacto sea rentable.

Según Cepesca, aunque en el compromiso se han conseguido mejoras técnicas en varias modalidades de pesca en comparación con el acuerdo anterior, la flota española había hecho otras peticiones que no se han atendido.

En concreto, según la misma fuente, el sector había reclamado cambios para las categorías de marisqueros (andaluces) y de arrastreros y palangreros dirigidos a especies demersales, que "podrían haber mejorado la actividad y la viabilidad de los pescadores españoles".

Además, Cepesca ha lamentado "profundamente" que, "una vez más", los barcos cefalopoderos hayan quedado excluidos del acuerdo, pese a que los armadores españoles habían presentado una propuesta alternativa "muy razonable" en el supuesto de que los mauritanos, "por motivos políticos", no quisieran permitir el acceso a sus excedentes de pulpo.

En este sentido, la patronal pesquera ha explicado que Mauritania no ha aceptado incluir una nueva categoría de arrastre congelador para especies demersales que, según la misma fuente, se encuentran "infraexplotadas" de acuerdo con los recientes informes científicos.

Según Cepesca, el acuerdo permitirá a los navíos españoles regresar al caladero africano a partir de diciembre, aproximadamente, tras el procedimiento obligatorio que tiene que seguir la UE para que el convenio se aplique provisionalmente.