Ucrania está que arde. Decenas de miles de opositores ucranianos tomaron este domingola plaza de la Independencia de Kievpara pedir la dimisión del presidente del país, Víctor Yanukóvich, y de su Gobierno, por no firmar el tratado de adhesión a la Unión Europea.
Hasta medio millón de personas, según los partidos opositores convocantes, y 150.000, de acuerdo con el Ministerio del Interior, acudieron a la principal plaza de Kiev, después de romper lasbarreras colocadas por la policía. La respuesta de la policía no se ha hecho esperar y hay un centenar de agentes heridos en los enfrentamientos.
Según la policía de Kiev, unos cien efectivos resultaron heridos en los enfrentamientos, de los que 35 fueron hospitalizados. También 59 militares enviados para contener a la multitud sufrieron heridas, mientras que por parte de los manifestantes53 tuvieron que recibir asistenciamédica.
La policía consiguió arrebatar a los manifestantes una excavadora con la que en dos ocasiones intentaron abrirse paso hacia el complejo. Las fuerzas de seguridad tampoco permitieron llegar hasta el complejo presidencial a unacaravana de 300 vehículosque iban tocando el claxon en señal de apoyo a la protesta.
Otro grupo de manifestantes rompió los cristales del Ayuntamiento de Kiev y logró entrar en el edificio, que fue declarado "cuartel general de la revolución" y han ocupado plaza de la Independencia. Un lugar simbólico en el que el gobierno había prohibido manifestarse, al menos, hasta el 7 de enero.
Creen que la decisión, a última hora, del jefe del ejecutivo de dar la espalda a su unión con Europa se debe a su intención de alinearse con la Rusia de Putin.
El Gobierno de Yanukovich no ha reconsiderado su decisión pero lo que sí ha hecho es emitir una nota en la que asegura que hará todo lo posible por estrechar sus relaciones con la Unión Europea. La nota, por el momento, no ha calmado el enfado de quienes protestan.