Es lo que sucede cada día en este pueblo de Macedonia. Miles de personas aguardan desesperadas la llegada de un tren de caldera que los aleje de la guerra y el terrorismo que golpea sus países. A lo largo del día llegan centenares de personas para intentar colarse por algún hueco del tren. El Gobierno de Macedonia, candidata oficial a entrar en la Unión Europea desde hace 10 años, está desbordado y pide ayuda a Europa.