El presidente francés, François Hollande, recibe en París a la canciller federal alemana, Angela Merkel, en medio de una profunda crisis de la zona del euro y con la intención de apoyar iniciativas que estimulen el crecimiento y generan empleo.

Ambos recibirán un informe destinado a identificar las medidas que ambos países pretenden impulsar para devolver Europa a la senda del crecimiento al día siguiente de que la OCDE publicara unas previsiones semestrales muy negativas para la eurozona.

En efecto, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico revisó a la baja sus previsiones para la zona del euro, cuya economía debería retroceder un 0,6 % este año y limitar su recuperación al 1,1 % en 2014.

Con ese panorama, Hollande y Merkel tienen una agenda apretada en París, que comenzará con la visita a la exposición que el museo del Louvre dedica a los fundamentos culturales del arte alemán de antes de la llegada del nazismo, que ha suscitado polémica en Alemania.

Posteriormente, ambos recibirán en el Palacio del Elíseo el informe del grupo de trabajo franco-alemán "sobre la competitividad y el crecimiento", la base del programa conjunto que presentarán a sus socios comunitarios.

La reunión entre Hollande y Merkel se produce al día siguiente de que la Comisión Europa presentara a Francia recomendaciones para que el país cumpla con sus objetivos presupuestarios, una lista de reformas estructurales que ponen de evidencia los problemas a los que se enfrenta el Gobierno del presidente galo.

Aunque la primera reacción de Hollande a las recomendaciones de Bruselas fue responder con un "no tiene que dictarnos lo que tenemos que hacer", los expertos de Bruselas han aclarado las deficiencias que París tiene que afrontar si pretende mantener a Francia como la segunda potencia económica de la Unión Europea.

Se espera de Hollande y Merkel que adelanten parte de su oferta a los otros socios de la Unión Europea aunque ya se conoce el apoyo que el presidente francés ha prestado a la idea de la creación de un gobierno económico europeo, en la que ha insistido en las últimas semanas.

Hollande se ha manifestado también a favor de otra idea, la de adelantar la aplicación de una partida de 6.000 millones de euros a favor del empleo en la Unión Europea incluso antes de la aprobación de los Presupuestos por parte del Parlamento Europeo.

En esta propuesta coincidió con Mariano Rajoy, con quien Hollande se reunió el pasado martes en París, y ante quien declaró una vez más formalmente: "Francia y Alemania podemos avanzar juntos".