El primer ministro británico, David Cameron, ha quemado en Escocia sus últimos cartuchos por el ‘no’ a la independencia. El primer ministro británico ha asegurado que “votar ‘sí’ no tendrá vuelta atrás”. Además, ha apelado a los sentimientos para convencer a los indecisos. Por el momento, los sondeos otorgan máxima igualdad en los votos.
Cameron: "La independencia supondría un divorcio muy doloroso"