El entrenador de Axpe, Francis Hernández, acudió la pasada madrugada al aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas con las pértigas, que miden más de 4 metros, para que fueran cargadas en la bodega del vuelo Madrid-Estocolmo que ha partido a las 10.00 horas, pero una vez allí el personal de Iberia le informó de que no había espacio en la bodega para trasladar el material.

La propia deportista, miembro del club Atlético San Sebastián, explicó a EFE que su equipo había llamado previamente a Iberia para informarse de los trámites y "había reservado sitio en la bodega del avión", pero al llegar a la terminal "la respuesta ha sido que no entraban".

"Sabemos que sí entran, porque otras veces hemos viajado en avión", añadió Maialen Axpe. "Cogimos un vuelo de Madrid a Estocolmo informándonos de que Iberia transportaba pértigas, ya que lo ponía en su web. Nos pusimos en contacto, llamamos, reservamos el sitio en la bodega del avión y mi entrenador las ha llevado desde Pamplona hasta Madrid en coche y ha estado desde las 4.00 de la mañana peleando para meter las pértigas y le han dicho que no, que no entraban", relató la saltadora.

Iberia explica que la compañía no se negó

Fuentes de Iberia informaron de que la compañía no se negó en ningún momento a trasladar las pértigas y explicaron que este material no se puede facturar como equipaje en la bodega, sino que se debe tramitar a través de una reserva de carga.

Este trámite tiene que efectuarse en una terminal específica que está a 11 kilómetros de la de pasajeros, que es a la que se dirigió el entrenador de Axpe con las pértigas. Iberia indicó que se trata de un procedimiento que hay que hacer con la debida antelación, porque requiere tramitar documentación para pasar el material por la aduana. La compañía añadió que, habitualmente, este tipo de reservas no las hacen directamente particulares, sino que se llevan a cabo "a través de un agente de carga".

"Eso lleva unos trámites que no les ha dado tiempo a hacer", añadieron las citadas fuentes. No obstante, Iberia aseguró que el personal que atendió al entrenador intentó por todos los medios introducir las pértigas en la bodega y las llegaron a medir, pero no las pudieron trasladar porque no había espacio suficiente.

Iberia insistió en que no se negó a transportar las pértigas y aseguró que ha cargado en más ocasiones este tipo de material deportivo, como cuando trasladó al equipo olímpico español, pero siempre a través de la terminal de carga.

La saltadora, de 26 años, es campeona de España y se había clasificado por primera vez para competir este jueves en Estocolmo en la Liga de Diamante, "que es como la Champions" del atletismo. "Era una oportunidad, la verdad", se lamentó.