Vamos a preparar un roscón de reyes, algo muy sencillo y que todos podemos hacer en casa. Necesitamos: 1 kilo de harina de fuerza, 6 huevos, ralladura de limón y ralladura de naranja, levadura fresca, agua de azahar, sal y azúcar.

Y con ellos a amasar, crear el riquísimo aro de bollo y esconder bien la sorpresa. Un roscón casero nos ofrece entretenimiento familiar para los días de invierno y ahorrar sin renunciar a la tradición. Podría costar 10 euros un roscón de 12 raciones.

Pero para quien quiera viajar un poco a través del paladar también existen otras posibilidades. El clásico y esponjoso panettone italiano. Lo que no puede faltar en uno clásico y tradicional es la fruta escarchada y las pasas rehogadas en grapa. Una receta clásica que promete trasladarnos a la mismísima Milán.

O el Baundkuchen. Un laborioso  y enorme bizcocho con sabor a huevos, azúcar y mantequilla. Es conocido como el pastel de árbol alemán. Helado, chocolate caliente y nata montada coronan este postre con sabor a una Navidad un poco más internacional.