El objetivo del estudio del equipo es ayudar al cuerpo a defenderse contra el cáncer cuando ya está presente o reducir el riesgo de recaída.

Para lograrlo, en la investigación usaron una técnica de polimerización llamada policondensación, probada con éxito en ratones. En este sentido, pensaron que la vacuna podría combinarse con inmunoterapias para obtener la mejor respuesta inmune posible.

Sin embargo, la entrega de una vacuna al sistema inmunitario no es fácil, puesto que implica varias etapas. Primero, se aplica dicha vacuna al paciente por vía cutánea, tras lo que viajará a los ganglios linfáticos, donde existen numerosas células inmunes. Una vez allí, se espera a que penetre en las células dendríticas, ya que actúan como una especie de mecanismo de alerta.

Si la vacuna las estimula correctamente, las células dendríticas generarán unos antígenos específicos para las células T que combaten el cáncer, un proceso que activa y entrena estas células para atacarlas.

Debido a que los componentes de la vacuna son muy pequeños y tienden a dispersarse o absorberse en el torrente sanguíneo antes de llegar a los ganglios linfáticos, este procedimiento se vuelve difícil de poner en práctica.

Por ello, la vacuna, denominada Neoepítopo de policondensado (PNE), contiene neoantígenos (antígenos mutados específicos del tumor a atacar) y un adyuvante. Cuando ambos se combinan dentro de un solvente, los componentes se unen naturalmente formando una entidad que resulta demasiado grande para ser absorbida por los vasos sanguíneos y viaja de forma natural a los ganglios linfáticos.

Una vez dentro de una célula dendrítica, los componentes de la vacuna se separan nuevamente, lo que permite a estas células presentar los antígenos correctos a las células T, y provocaría una potente respuesta inmune.

De este modo, los autores explican que dicha vacuna, combinada con un análisis altamente avanzado de los neoantígenos de cada paciente, debería permitir que el sistema inmunitario de los pacientes con cáncer se active de manera personalizada y segura.

No obstante, el equipo aún se encuentra perfeccionando la fase en la que se detectan los antígenos específicos del tumor.