La ciencia médica ha dado un paso crucial hacia la detección temprana del cáncer de próstata, uno de los tumores más frecuentes entre los hombres. Un equipo internacional de investigadores, liderado por el Instituto Karolinska de Suecia en colaboración con el Imperial College de Londres y el Hospital Xiyuan de Pekín, ha demostrado que una simple muestra de orina podría bastar para detectar esta enfermedad con gran precisión.
El estudio, publicado en la revista 'Cancer Research', se basa en el análisis del ARNm de todos los genes humanos presentes en miles de células individuales de tumores prostáticos. Esta minuciosa recopilación de datos permitió a los científicos crear modelos digitales del cáncer de próstata, cuya información genética fue posteriormente analizada mediante inteligencia artificial (IA).
Los modelos analizados por la IA en la sangre, tejido prostático y la orina fue de casi 2.000 pacientes. El objetivo era encontrar proteínas específicas que actúen como biomarcadores diagnósticos.
Los resultados han sido contundentes. Se ha identificado un conjunto de biomarcadores presentes en la orina que no solo permiten detectar la presencia del cáncer, sino también estimar su gravedad. Según los investigadores, estos nuevos indicadores superan la precisión del antígeno prostático específico (PSA), actualmente utilizado en el diagnóstico clínico.
“La medición de biomarcadores en orina ofrece muchas ventajas: es un método no invasivo, indoloro y que potencialmente podría realizarse en casa”, señala Mikael Benson, investigador sénior del Departamento de Ciencias Clínicas del Instituto Karolinska. “Las muestras podrían ser analizadas en laboratorios clínicos mediante métodos rutinarios”.
La investigación se encuentra en una fase avanzada y ya se están planificando ensayos clínicos a gran escala. Uno de estos proyectos está siendo impulsado por el profesor Rakesh Heer del Imperial College, director del estudio nacional británico TRANSFORM, que proporciona una plataforma para acelerar la validación de estos prometedores biomarcadores.
El hallazgo podría revolucionar el enfoque clínico hacia el cáncer de próstata. Tal como subraya Benson, “estos biomarcadores pueden no solo conducir a diagnósticos más tempranos, sino también evitar biopsias innecesarias en hombres sanos, mejorando la calidad de vida de miles de pacientes”.