La leucemia linfoblástica aguda hiperdiploide se considera una de las patologías más frecuentes entre estos tipos de cáncer infantil. Ahora, gracias a los avances de un equipo de investigación del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras, podrían haberse descubierto los mecanismos que suponen el desarrollo de este subtipo de leucemia linfoblástica aguda de células B (LLA-B).

En concreto, los autores del estudio se han centrado en el proceso de mitosis de las células. Para ello, se han examinado muestras de LLA-B de 54 pacientes, que mostraban hasta tres procesos distintos que suponían una incorrecta segregación cromosómica durante la división celular.

Por otra parte, los investigadores comprobaban también, que interrumpir estos procesos de forma artificial o mediante factores externos, en células de la sangre sin afectar por esta patología pediátrica, derivaba en células hiperdiploides similares a las de las muestras.

De esta forma, se demuestra que los factores clave que pueden derivar en el desarrollo de leucemia linfoblástica aguda hiperdiploide se encuentran en el complejo de proteínas de la condensina, encargado de ayudar a incluir el material genético en los cromosomas; en la proteína aurora B quinasa, responsable de la correcta unión cromosómica; así como en el punto de control celular de este último paso, conocido como SAC.

Gracias a estos descubrimientos podría comprobarse si otros subtipos de este cáncer pediátrico, como la leucemia linfoblástica aguda hipodiploide, comparten similitudes en su desarrollo. Además, esto permitirá generar los primeros modelos preclínicos en vivo, enfocados a nuevas terapias y tratamientos más eficaces contra esta patología.