Una investigación realizada por la Clínica Mayo ha confirmado que la combinación de dos tipos de tratamiento contra la Covid-19 basados en anticuerpos monoclonales, casirivimab e imdevimab, evita que los pacientes de alto riesgo que se contagian sean hospitalizados.

En el estudio, publicado en la revista EClinicalMedicine de The Lancet, participaron cerca de 1.400 pacientes de la Clínica Mayo, de los cuales, 696 recibieron este tratamiento combinado entre diciembre de 2020 y principios de abril de 2021.

El estado de los pacientes se revisó a los 14, 21 y 28 días tras recibir el tratamiento. De este modo, se fue observando cómo las hospitalizaciones mejoraron. Al finalizar los 28 días, el 1,6% de los tratados fueron hospitalizados, frente al 4,8% de las hospitalizaciones de quienes no habían recibido el tratamiento.

Esto significa que las hospitalizaciones de los pacientes tratados se redujeron de un 60 a un 70 por ciento. Además, aquellas personas que posteriormente requirieron hospitalización, también redujeron los ingresos en UCI y la tasa de mortalidad.

Por otro lado, la Clínica Mayo realizó un estudio anterior publicado en The Journal of Clinical Investigation, cuyos resultados mostraron que el uso de bamlanivimab redujo la hospitalización de los pacientes de alto riesgo de un 40 a un 60 por ciento.

También se apreció una disminución de los ingresos en UCI y de la tasa de mortalidad. Por todo ello, la FDA de Estados Unidos avala, ahora, el uso de anticuerpos monoclonales combinados como una buena opción para tratar el coronavirus en pacientes de alto riesgo.