Autor: Jon Fosse

Traductoras: Cristina Gómez Baggethum y Kirsti Baggethum

Editorial: De Conatus

Año de publicación original: 2014

El Premio Nobel de Literatura de 2023 ha recaído sobre el dramaturgo, novelista y poeta noruego Jon Fosse. Un fijo en las quinielas que ha conseguido el galardón bastante joven, comparado con los últimos colegas premiados, con tan solo 64 años recién cumplidos. Solo la polaca Olga Tokarczuk fue encumbrada más joven.

La obra de Fosse ha estado ligada al teatro desde sus comienzos. Sin embargo, al llegar a la madurez, el noruego ha decidido explorar la narrativa en busca de mayores posibilidades expresivas. Fruto de ello es Mañana y tarde, una novela publicada en Noruega en el año 2000, que se acaba de lanzarse hace unos días por primera vez traducida a nuestro idioma, gracias a la colaboración de las editoriales De Conatus y Nórdica.

'Trilogía', la primera piedra

En esta novela inicial se pueden ver los rasgos que definen el estilo de Fosse. Una prosa fluida, sin artificios, donde la abundancia de comas y la escasez de puntos convierten la lectura en un río, un arroyo si se quiere, por donde avanza la historia. Ahí el lector puede bucear, cuando la trama está en calma, por las profundidades de la psique humana. Y dejarse llevar cuando los acontecimientos se precipitan.

'Trilogía' es una especia de poema en prosa donde la historia se desarrolla en múltiples direcciones temporales

Sin embargo, fue con Trilogía, cuando Fosse alcanzó un nuevo nivel en su prosa. Un nivel con el que ha conseguido ser considerado uno de los 100 genios vivos para el Daily Telegraph. Un texto complicado, casi vanguardista, donde la estructura clásica de la frase desaparece en busca de una mayor expresividad. Una especie de poema en prosa donde la historia se va desarrollando en múltiples direcciones temporales.

Fosse, católico convertido, cuenta una historia que seguro que nos suena: una joven pareja busca un lugar que les acoja para que ella, embarazada, pueda dar a luz. Sin embargo, como en la vida, nada es sencillo para esta pareja, que tendrá que afrontar la crueldad del mundo en el que vivimos. Incluso la ciudad que recorren en busca de asilo, Bergen, tiene un nombre que suena parecido a Belén.

Prosa minimalista

Con esta sencilla premisa, Fosse es capaz de explorar la profunda ferocidad de la sociedad sin perderle la vista a la calidez del primer amor, ni siquiera al vacío que deja la muerte de un ser querido ni la ilusión y el miedo que genera la aparición de una nueva vida. Y todo ello lo hace sin excederse con los adjetivos, sin artificios en la palabra.

Como un pintor parco en pinceladas, capaz de dotar de expresividad con unos pocos rasgos, Fosse va retratando a esta pareja casi sin describirla. Y somos cómplices de su indefensión y de su angustia, pero también de lo importante que es el cariño para reconfortarse. Del poder de la solidaridad y de la importancia de todo lo que nos ocurre cuando somos unos niños.

Septología, la obra cumbre

Es Trilogía, quizá, la mejor puerta de entrada a la gran obra en prosa de Fosse. La que comprende estas tres historias cortas y cuyo camino ha continuado y ha ampliado en su gran obra, Septología.

Dividida en siete novelas y varios volúmenes, cuenta la historia de un pintor viudo que decide alejarse del mundo, mudándose a un pequeño pueblo de la costa. Cada una de las siete partes comienza con el protagonista ante uno de sus cuadros, tratando de descifrar si esa obra suya está terminada o no.

Nos adentramos por cada una de las historias que propone tratado de entender y entendernos

Del mismo modo, los lectores de Jon Fosse nos adentramos por cada una de las historias que propone, en sus novelas, en sus obras de teatro, en su poesía... tratado de entender y entendernos. Y esperando que el siguiente laberinto que nos ofrezca no sea el último.