El papa Francisco ha dicho comprender a las víctimas de abusos sexuales por parte de miembros de la Iglesia que no perdonan a quienes los cometieron después de haberse reunido en Filadelfia, Estados Unidos, con algunas de aquellas. "Sí, los comprendo, rezo por ellos y no los juzgo", ha explicado el pontífice a medios de comunicación a bordo del avión papal que le ha llevado a Roma desde la ciudad estadounidense, donde ha terminado su décimo viaje internacional. 

"Una vez en una de estas reuniones me encontré con varias personas y una mujer me dijo: 'cuando mi madre se enteró de que me habían abusado blasfemó contra Dios, perdió la fe y murió atea". "Yo la comprendo a esa mujer. La comprendo. Y Dios, que es más bueno que yo, la comprende. Y estoy seguro que a esa mujer Dios la ha recibido porque lo que fue manoseado, lo que fue destrozado era su propia carne, la carne de su hija". 

"Yo la comprendo. No juzgo a alguien que no puede perdonar. Rezo y le pido a dios porque dios es un campeón en buscar caminos de solución. Pido que lo arregle", ha afirmado el papa. Bergoglio ha hecho estas declaraciones horas después de haber revelado en Estados Unidos que algunos obispos cometieron abusos sexuales a menores, circunstancia que ha calificado de "inquietante". 

El papa ha mantenido en Filadelfia una reunión con cinco víctimas de abusos sexuales cuando eran menores y posteriormente ha explicado que esos delitos serán perseguidos. "Hoy hablé duro", ha admitido Bergoglio en referencia a sus palabras del en Filadelfia sobre los casos de pederastia cometidos por miembros del clero en Estados Unidos.