La Policía belga ha detenido a cinco personas en relación con la explosión que se ha registrado en el Instituto Nacional de Criminología de Bruselas, precisando que ha sido esto lo que ha provocado la deflagración.

La fiscal Ine Van Wymersch ha sostenido que no hay indicios por el momento de que el incendio en el edificio, que estaba vacío en el momento de los hechos, sea un ataque miliciano, aunque por ahora "no se ha descartado ninguna hipótesis. "

Fue un incendio intencionado, un incendio deliberado en el laboratorio de la Policía federal", ha explicado. "Con un incendio se producen explosiones, pero no se lanzaron explosivos dentro o se instalaron", ha aclarado la fiscal.

Según Van Wymersch, aunque una de las hipótesis que se barajan es que haya podido ser un atentado, "ciertamente no es lo primero en lo que estamos pensado". "Pensamos más en un incendio premeditado por el crimen organizado. No tenemos indicios de que fuera terrorismo", ha insistido. El instituto está vinculado al Ministerio de Justicia belga y lleva a cabo las investigaciones forenses en los casos criminales, según su web.

En el Instituto se custodian y se analizan las pruebas de múltiples delitos por lo que se cree que el objetivo del ataque era la destrucción de pruebas. Las autoridades no tienen indicios de que se trate de un ataque terrorista aunque aún no se descarta.