Tanto el mercado de
segunda mano como el de vivienda nueva han sido los impulsores de este
crecimiento anual, el cuarto consecutivo después de que la compraventa de
viviendas subiera un 2% en 2014, un 11,5% en 2015 y un 14% en 2016.
En el periodo de crisis,
los peores años para las transacciones de vivienda fueron 2009 y 2008, en los
que estas operaciones se desplomaron un 25,1% y un 28,8%, respectivamente. En
2012 y 2011, aún se registraban descensos de dos dígitos (-11,5% y -18,1%),
mientras que en 2013 la caída se moderó hasta el 1,9% por el fin de los
beneficios fiscales para la adquisición de vivienda.
El repunte de la
compraventa de viviendas en 2017 se ha debido al crecimiento experimentado en
las operaciones sobre pisos de segunda mano, que se dispararon un 15,4%, hasta
381.163 transacciones, su cifra más alta desde 2007, y también a las
operaciones sobre viviendas nuevas, que se incrementaron un 10,8% el año
pasado, hasta sumar 83.260, su volumen más alto desde 2014.
El 90,2% de las viviendas
transmitidas por compraventa durante el año pasado fueron viviendas libres y el
9,8%, protegidas. En total, la compraventa de viviendas libres subió un 15,1%
en 2017, en tanto que las operaciones sobre viviendas protegidas repuntaron un
9,5%, hasta 45.508 transacciones, encadenando tres años consecutivos de alzas.
En 2017, el mayor número
de compraventas de viviendas por cada 100.000 habitantes se dio en Comunidad
Valenciana (1.753), Baleares (1.717) y Madrid (1.375). Andalucía fue la región
que más operaciones sobre viviendas realizó el año pasado, con 89.337
compraventas, seguida de Cataluña (76.369), Madrid (70.203) y Comunidad
Valenciana (68.512).