David DeMaría está aprovechando el confinamiento para pasar más tiempo con su hijo Leo, de cuatro años. El cantante reconoce que estos son momentos de "bloqueo creativo", pero asegura que el pequeño le sorprende con su propia creatividad.

"A los niños les salen unas frases tan bonitas, tan poéticas", afirma en Más Vale Tarde, donde revela que Leo, un día que llovía en Madrid, llegó a decirle que estaba "lloviendo de tristeza" y que incluso ha afirmado que "el coronavirus nos ha robado la primavera".

A partir del domingo, cuando los menores de 14 años puedan salir de paseo, aprovecharán para salir en bicicleta, "porque ya estaba empezando a aprender".

"Ellos han entendido muy bien que en el parque no se podía jugar porque ahí estaba el bichito", apunta David DeMaría, que sostiene que los niños "nos están dando una lección de acoplamiento". "Han hecho de la casa su campamento, su parque de atracciones particular, su playa...", reflexiona.

"Creo que tienen muchas más ganas de ir al cole, que quién nos lo iba a decir, que de jugar en el parque. Tienen ganas de volver a abrazar a sus amigos", añade. Algo que, apunta, aún no será posible.

El artista, que representa también a aquellos padres separados que están teniendo que gestionar el régimen de visitas en plena cuarentena, narra también cómo está siendo esta experiencia. "Me ha parado la Guardia Civil, la Policía, incluso el Ejército", relata, aunque afirma que "ha estado todo bien coordinado" y que no ha habido problemas.

"Me alegro mucho de que hayan permitido que el régimen de visitas se haya mantenido sin problemas. Los niños lo han agradecido", afirma el cantante, que se ha despedido a ritmo de tango de Cádiz.