A partir de ahora los pacientes con enfermedades crónicas o graves que necesiten medicamentos de los que se adquieren en el hospital, tendrán que pagar un 10%. Esto afecta a enfermos de VIH, hepatitis, enfermos oncológicos en tratamientos de quimioterapia o radioterapia. También a los autoinmunes.

Ese 10% que habrá que pagar en los medicamentos de dispensación hospitalaria tendrá un tope máximo por envase. Exactamente 4,20 euros por envase, aunque lo cierto es que muchas de estas dolencias precisa más de un envase de medicación al mes.

Ejemplos, un enfermo de esclerosis múltiple puede necesitar un tratamiento que alcanza los 1.800 euros al mes. O una mujer con tratamiento de quimio por cáncer de mama, 30.000 euros de tratamiento al año. Hasta ahora no tenían que pagar por esos medicamentos. A partir de ahora, les tocará pagar un 10% de cada envase que se le suministre. 

Envases, insistimos muy caros. Dentro de la lista de más de 50 medicamentos sujetos al copago está por ejemplo: AFINITOR, para tumores de pecho. Una caja de 30 comprimidos cuesta casi 3.500 euros. Por ese envase, el enfermo o la enferma, debería abonar 4,20 euros. Súmenle el resto de medicación que se les suele administrar para estimular la creación de glóbulos rojos, la que se les administra también a veces para estimular la creación de glóbulos blancos. Al final, estar enfermo además sale caro.