Capaz de tumbar la especulación con dos frases, Mario Draghi tiene un nuevo enemigo, la deflación, la caída de precios. Ahí tiene las manos más atadas que de costumbre, por eso ha vuelto a usar la palabra.
"La vuelta al crecimiento del empleo pasa por una combinación de políticas monetarias, fiscales y estructurales, tanto a nivel comunitario como a nivel nacional", palabras que según el diccionario Draghi-Resto del mundo significa: "Bajen impuestos, gasten más".
Los países, que ven las elecciones inmediatas, han tomado nota ante la mirada atónita de Alemania. Draghi ha vuelto a usar la palabra para evitar una crisis y para evitar tener que cumplir su promesa. O lo que es lo mismo: estimular la economía como sí han hecho EEUU, Reino Unido o Japón.