Una madre se plantea denunciar a los médicos que atendieron a su bebé de ocho meses y no detectaron que el pequeño tenía una moneda atascada en su garganta.
Samantha Knox explicó que, hace cuatro meses, su hijo tenía fiebre y lo llevó al pediatra pero estos lo achacaron a un virus, sin llegar a hacerle una revisión completa, según informa KLTA.
De este modo, el pequeño llegó a pasar 37 días con el penique bloqueando su garganta, una situación que podría haber tenido un fatal desenlace, ya que podría haber muerto por asfixia. Aunque volvió a preguntar a los médicos hasta en cinco ocasiones, no le ofrecieron otro diagnóstico.
Al comprobar que la fiebre no bajaba e incluso alcanzó los 39 grados, decidió llevar al niño directamente al hospital. Allí por fin detectaron la causa de su malestar. La moneda había provocado dos úlceras en la garganta.
El niño fue sometido a una exitosa operación y ya puede hacer vida normal, pero su madre trata de recuperar el dinero que pagó a los médicos.