Unos 5.500 niños se incorporarán desde este jueves a los comedores escolares en 160 colegios que están abiertos durante el verano en la Comunidad, adonde acudirán para recibir la comida y para participar en las actividades extraescolares, medida que costará cuatro millones a las arcas de la región, 500 euros por niño.
Una medida promovida por la Comunidad en la que han participado gran parte de los Ayuntamientos, salvo una decena, entre ellos el de la capital, que han declinado la propuesta al tener sus propias iniciativas para garantizar la comida a los menores que la necesitan.
El consejero de Educación, Juventud y Deporte, Rafael Van Grieken, ha explicado que los niños se han seleccionado partiendo de aquellos que durante el curso recibían la beca comedor, a los que los distintos ayuntamientos han agregado otros menores que, según los servicios de asuntos sociales, cumplen con los requisitos para ser beneficiarios de esta medida.
A su vez, ha especificado que los primeros niños en incorporarse a los colegios lo harán este jueves, en el caso de los municipios más pequeños, y a partir del lunes en el resto de localidades.
Y en el caso de Madrid capital, si el Gobierno regional cree que la comida a domicilio que el Ayuntamiento tiene previsto repartir no llega a todos los menores que lo necesitan, a finales de la semana próxima se baraja la apertura de los comedores de algunos institutos sobre todo en los distritos donde hay más beneficiarios de la renta mínima de inserción, como Puente de Vallecas, Usera o Carabanchel.