Durante la campaña, el Trump candidato ha declarado la guerra económica. "No podemos seguir permitiendo que China viole a nuestro país y es lo que están haciendo. Es el mayor robo de la historia", ha valorado Trump tras su elección.
El candidato republicano ha prometido dar la batalla arancelaria empezando por gravar los productos chinos y mexicanos. "Una dinámica de aumento de aranceles generalizados que afectaría a México, China y Europa. Si eso ocurriera podríamos estar ante el fin de la moderna globalización", considera el catedrático de Economía en la Universidad de Vigo, Xoxe Carlos Arias.
Frenar la globalización y renegociar los tratados comerciales era una de las promesas del nuevo presidente, pero no lo tendrá tan fácil. Por si había dudas, tras su elección como presidente, Trump ha suavizado el discurso.
"Vamos a llevarnos bien con todas las naciones que se quieran llevar bien con nosotros", aseguró el magnate republicano. Los expertos tienen claro que poner patas arriba el comercio internacional no es tan fácil.