La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha determinado este lunes que el aumento de contagios ocurrido durante las últimas semanas en Europa se trata de una situación muy preocupante.

Algunas de sus causas son el incremento de la presencia de la variante delta, que resulta más contagiosa, así como la ralentización de las vacunas en ciertos países europeos y la relajación de las restricciones con motivo de las vacaciones de verano.

En este sentido, de los 53 países que constituyen la región europea de la OMS, 33 de ellos sufrieron una subida de la incidencia del 10% durante las últimas dos semanas.

Además, están aumentando los ingresos y las muertes, y podrían alcanzar una cifra de 236.000 desde ahora hasta el 1 de diciembre. La OMS explica que este territorio ha registrado 64 millones de casos y 1,3 millones de muertes desde el inicio de la pandemia.

Con respecto a la vacunación, casi la mitad de la población de la región europea ha alcanzado la pauta completa, pero durante las últimas seis semanas se ha producido un proceso de ralentización por la inaccesibilidad a las vacunas que experimentan algunos países o la falta de aceptación de otros.

Esto evidencia la necesidad de incrementar la producción y la compra de dosis, así como mejorar el acceso a las vacunas de los Estados miembros. Por otro lado, la OMS retiró su petición de abrir las escuelas para un curso presencial 2021-2022.

Además, ha recomendado a los gobiernos que establezcan medidas preventivas que minimicen el riesgo de contagios, como la posibilidad de que los profesores y el resto de personal puedan vacunarse, así como los escolares mayores de doce años que tengan alguna enfermedad o sean vulnerables al virus.