Un nanocuerpo, capaz de atravesar la barrera hematoencefálica y activar un receptor neuronal, es la clave de esta propuesta para el tratamiento de la esquizofrenia. Este avance abre la puerta a nuevas estrategias terapéuticas más eficaces frente a los síntomas cognitivos de esta enfermedad mental.
La esquizofrenia afecta al 1% de la población mundial y, aunque los tratamientos actuales pueden aliviar algunos síntomas, siguen siendo poco eficaces frente a alteraciones cognitivas que condicionan la autonomía de los pacientes. El estudio, publicado en "Nature", presenta una innovación con potencial para revertir ese escenario: una molécula basada en anticuerpos de llama, administrable por vía venosa o intramuscular, que consigue llegar de forma eficaz al sistema nervioso central.
Una semana de efecto tras una sola inyección
Los ensayos preclínicos realizados en modelos murinos han mostrado mejoras claras en la función cognitiva desde la primera dosis, con efectos sostenidos durante al menos siete días. El nanocuerpo actúa sobre un receptor de glutamato implicado en la modulación de la actividad neuronal, clave en los procesos de memoria, aprendizaje y atención.
Aunque será necesario confirmar estos resultados en humanos, los investigadores destacan que se trata de una estrategia con aplicaciones más allá de la esquizofrenia. El uso de nanocuerpos para modular funciones cerebrales de forma segura podría extenderse a otras enfermedades neurológicas, como el alzhéimer o el párkinson.
Este descubrimiento refuerza el potencial de la biotecnología en el desarrollo de tratamientos más dirigidos y menos invasivos para trastornos mentales complejos.