Sergio López tiene 28 años, un trabajo manual, y llegó al hospital de Traumatología con mucho dolor en la muñeca y varios diagnósticos erróneos hasta descubrir que tenía la enfermedad de Kienböck, una dolencia degenerativa que había matado uno de los huesos de su muñeca, ya necrosado.

El delegado de Salud en Granada, Indalecio Sánchez-Montesinos, ha explicado durante la presentación de esta intervención que el paciente tenía afectada una de las articulaciones más importantes, lo que se ha solventado con una impresión en 3D fabricada por una empresa del Parque Tecnológico de la Salud (PTS)

Los médicos responsables de la intervención, Enrique López Herrada y David Peris, han detallado que el joven tenía limitado el movimiento de la muñeca por la afección al hueso semilunar, al que había dejado de llegar la sangre y que presentaba necrosis.

Su diagnóstico llegó como es habitual en esta enfermedad cuando la dolencia estaba en un estadío avanzado, ya con pequeñas fracturas que hacen que el hueso colapse y deje sin movimiento la muñeca.

Descubrieron el único caso documentado en el mundo de una operación similar con un implante personalizado y elaborado con una impresora 3D, una operación ejecutada con éxito en China para tratar una muñeca.

El equipo español contactó con el chino para ahondar en esta operación pionera y encargaron la prótesis a la empresa BRECA Health Care, una firma ubicada en el Parque Tecnológico de la Salud (PTS) que ha creado en titanio este hueso a medida.

La tecnología de impresión en 3D aplicada a traumatología comenzó en EEUU en 2016 y ha sido la alternativa para que Sergio no pierda por completo la movilidad de la muñeca en una operación que pasó a ser el plan b.

El nuevo hueso del paciente se ha elaborado con un escáner y la imagen especular del hueso bueno de la otra muñeca, lo que ha permitido que cinco meses después, el paciente haya recuperado 50 grados de movilidad, un logro al que se sumarán nuevos avances.

Sergio ha destacado que su nueva muñeca gana movilidad cada día y que, cuando acabe la rehabilitación con el fisioterapeuta, espera volver a trabajar con normalidad y sin dolor.