David Foster Wallace

Editorial: Mondadori

Año: 1996

Sinopsis: En un futuro próximo, los años han perdido su numeración en favor de patrocinios publicitarios. Así, en pleno Año de la Ropa Interior Para Adultos Depend, una extraña película llamada 'La Broma infinita' se extiende como una plaga: cada persona que la ve disfruta tanto que ya no quiere hacer nada más, hasta morir de hambre.

Su autor, el extraño James incandenza, fundador de una de las escuelas de tenis más prestigiosas de Norteamérica, se suicidó hace años, lo cual no le impide aparecer ocasionalmente por las páginas de esta inclasificable novela en forma de fantasma. Mientras tanto, los Asesinos en Sillas de Ruedas, un grupo separatista de Quebec, buscan una copia maestra de la película para utilizarla como arma definitva.

Por qué recomendamos 'La broma infinita', de David Foster Wallace

Empezar a leer 'La broma infinita' es como dejarse seducir por esa película que circula por las páginas del libro como un virus mortal. Al principio hace gracia, después no entiendes nada pero cuando te quieres dar cuenta, estás hipnotizado por la minuciosidad de la prosa y la abrumadora cantidad de personajes, tramas, ideas y términos que aparecen ante tus ojos.

Así, como a bofetadas, la novela va desgranando un argumento que no se deja contemplar con claridad en ningún momento, hasta que al cerrar el libro, en tu mente se disipa la niebla que ocultaba la clave de 'La broma infinita'. Sin embargo, esa aparente solución final no soporta una puesta en común con otro lector, ni una comparativa con reseñas anteriormente escritas. Porque esta broma, tan infinita como es, tiene tantas explicaciones como lectores pasen ante ella.