Aunque se desconocen los umbrales necesarios para la inmunidad de rebaño frente a la Covid-19, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha establecido un objetivo de cobertura de vacunación mundial del 70% para mediados de 2022.

Por su parte, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han lanzado una herramienta que ofrece orientación sobre el uso de mascarillas en función de lo niveles de Covid-19 en cada uno de los más de 3.000 condados.

Mantener su uso en espacios públicos cerrados y en el transporte público durante al menos dos semanas después de alcanzar los objetivo de vacunación contra la Covid-19, podría surtir efecto, según un estudio publicado en la revista 'The Lancet Public Health'. Esta nueva investigación señala que cuanto menor sea el nivel de cobertura de vacunación de la población, mayores serán los beneficios económicos y sanitarios de mantener el uso de mascarilla en interiores.

Si se siguen utilizando las mascarillas en los niveles observados entre marzo y julio de 2020, entre dos y diez semanas después de alcanzar los objetivos de vacunación, se ahorrarían millones de dólares y se reducirían las hospitalizaciones y muertes por Covid-19.

Estas nuevas recomendaciones llegan en un momento en el que en muchos países, también en España, se está empezando a considerar la posibilidad de suavizar los requisitos de la mascarilla, y la elección de usarla dependerá de decisiones individuales o de las empresas.

Estudios realizados anteriormente han demostrado que las mascarillas disminuyen la propagación del virus. Sin embargo, el valor económico de mantener su uso no ha quedado claro.