Los investigadores estaban observando el papel de la microbia intestinal en la colitis amebiana, una infección que puede ser letal y además, es muy común en los países en vías de desarrollo.

Así pues, analizaron las heces de niños de los barrios más pobres de Dhaka, en Bangladesh. Con esta muestra obtuvieron que los niños que sufrían infecciones más graves tenían menos diversidad en su microbia intestinal por el uso abusivo y extendido de los antibióticos, y es que hay niños que con dos años han recibido más de 24 tratamientos.

Para llevar a cabo la investigación, los expertos utilizaron ratones para determinar cómo la disminución de la flora intestinal natural podía empeorar la enfermedad, por lo que vieron que los antibióticos interrumpían la presencia de microbios en el intestino para disminuir la actividad de los neutrófilos e impedir responder a estos glóbulos blancos ante la entrada de un patógeno exterior.

Los neutrófilos juegan un papel fundamental como respuesta inmune cuando un patógeno externo entra en nuestro organismo y el uso abusivo de antibióticos los neutraliza.

Esta es, según los expertos, una de las razones más importantes para limitar el uso de estos medicamentos y combatir la resistencia que muchas bacterias están desarrollando contra los de uso más común.